MENCIÓN 2011
DOS VIVIENDAS UNIFAMILIARES EN LA MANGA CLUB . Cartagena
descripcion fotos
(*) RQ3N4LfzYd 7v4K0gQzQ4 zr8B6DlQqj b0Si1dk3Gf Fz1ljEcQMY
Arquitecto:José de Villar Martínez / Promotor:Bellavistalamace, S.L. / Constructor:Construcciones y Promociones Marcaser, S.L. / Arquitecto técnico:Juan Isidro Ros Espín - Mercedes Herrera Fernández - Juan Antonio Bernal Abenza / Colaborador:Carlos Chacón Pérez - Antonio Marsal Martínez
¿Tenemos sentido del equilibrio?
1. m. Facultad fisiológica por la que algunos seres vivos perciben su posición en el espacio.
Desde el principio nuestra intención fue mantener el equilibrio. Nos referimos al equilibrio en el sentido de prudencia y sensatez.
Nos recordaba la actitud del fotógrafo Julius Shulman fotografiando la casa Stahl (case study house nº 22, California 1960) sobre una de sus barandillas. Sensato en su actitud ya que pese al riesgo de buscar el encuadre más acertado, ha medido prudentemente todas las fuerzas encontradas (cabeza, pie, cámara, brazo, gafas) que obran en su poder compensándolas y manteniéndose en equilibrio.

El equilibrio entre los deseos inciertos de los futuros habitantes, el lógico interés comercial del promotor, el más que discutible marco urbanístico, el potencial del lugar y el programa de una segunda residencia.

La solución proyectada se organiza en un conjunto formado por seis viviendas unifamiliares aisladas (de las cuales se ha completado la primera fase de dos viviendas) respetando al lí­mite los retranqueos que establece la norma y optando por la construcción en dos plantas más sótano.

Dividimos cada vivienda en tres volúmenes blancos buscando el adecuado equilibrio entre ellos. Esta diferenciación favorece una mayor adaptación a la pendiente del terreno. Las conexiones entre ellos serán espacios de paso acristalados y protegidos con una celosí­a de madera de pino, que favorecerá a su vez una lectura ambigua entre lo que es interior o exterior al pasar de uno a otro.

Cada volumen alberga una habitación diferenciada; en planta baja, las zonas de día (de mayor altura libre) corresponden al
programa de sala de estar, comedor y cocina.

En planta alta, las zonas de noche, dos dormitorios y dos baños. Las escaleras son elementos lo más ligeros posibles para favorecer las vistas cruzadas. Una cuarta habitación, la alberca, de dimensiones parecidas al resto de las habitaciones viene a singularizar cada vivienda, al girar y adaptarse a cada parcela en busca de la mayor exposición solar.

Entre las piezas se intercalan distintos patios que proporcionan luz a la planta sótano que quedará incorporada al discurso arquitectónico como una planta más, de igual importancia. La vivienda se abre a estos patios, a estos lugares intermedios buscando intimidad, sombra, ventilación y dejando altas medianeras blancas que dan la espalda al vecino próximo.

¡Entonces lo tenemos!